Un padre ha decidido que los dibujos que hace su hijo pequeño queden tatuados de por vida en todo su cuerpo. Su nombre es Keith Anderson, y se ha llenado el cuerpo de tatuajes “diseñados” por su hijo.
Los dibujos que Anderson no ha dudado en plasmar en su piel van desde alguno que su hijo hizo cuando tenía apenas 4 años hasta ahora, que tiene once.
Los dibujos tienen diversos motivos: desde árboles y flores, hasta un caballito de mar o un retrato de él mismo que se atrevió a dibujar el pequeño.
Según asegura el padre, tatuarse los dibujos es una muestra de amor hacia su hijo y un bonito recuerdo de él. Además, al pequeño le encanta acompañar a su padre al local de tatuajes cada vez que decide hacerse uno nuevo.
Fuente Noticias y Curiosas
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